El profesor de mi hermano le contó esta historia en su clase, de cómo se inició este asunto del horóscopo en uno de los diarios más antiguos y emblemáticos del país: el Comercio. Su profesor es un catedrático entrado en años, que ha visto y recorrido el mundo, y que de vez en cuando les suelta cosas, como viejas anécdotas de sus aventuras, pequeños recuerdos de vida.
La otra vez les empezó a contar que antes de que existieran los horóscopos en los diarios, el Comercio fue uno de los primeros (si es que no el primero), en incluir esta sección de astrología y destino.
Según la leyenda un día un sujeto se acercó a la redacción del Comercio y le plantó esta idea al director del diario, de escribir cosas sobre los signos de las personas. No sé si era un especialista, un adivino, un astrólogo. En fin la idea no convencía del todo al director, pero la aceptó.
Grata fue su sorpresa al comprobar que esta idea funcionaba, la respuesta de la gente era positiva. Y continuó así por un tiempo. Pero una mañana el hombre de los signos no se presentó a trabajar, estaba enfermo y tuvo que ausentarse por un largo tiempo del trabajo.
El director del periódico no quería perder lectores así que puso a uno de sus subalternos a realizar este trabajo. Ese “subalterno” es el amigo del profesor de mi hermano, y durante ese periodo solo se limitó a modificar, parafrasear, inventar o cambiar los textos antiguos de su predecesor, y así estuvo inventando por una temporada hasta que el otro sujeto volvió aparecer en el trabajo.
Creo que es así como se maneja esto de los horóscopos en los diarios, yo soy de los que no creen lo que dicen en sus páginas, pero que como todos inevitablemente termino leyendo.
Puede que antes lo escribiera hasta la hija del vecino.. pero supongo q ahora por.. credibilidad debe de ser legal, en el peor de los casos la misma persona estaria parafraseando y ningun horoscopo seria verdadero
ResponderEliminarPARECE QUE LAS COINCIDENCIAS EXISTE AUNQUE SOPLO SEAN INVENTADAS PERO EN AGUNOS CASOS EL HOROSCOPO TIENE ALGUNOS ACIERTOS
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